Palacio
Uno de los requisitos del cliente para la marca gráfica ha sido que fuera igual de importante tanto el hecho de que su soporte de venta es digital, como que sus productos son juguetes.
Para la marca gráfica se ha optado por una composición tipográfica poco ortodoxa, atrevida, pero de igual legibilidad. Mediante el redondeado de las letras, la rotación de alguna de las mismas, y la gama cromática de colores vivos, se consigue la connotación infantil y a la vez didáctica.
Las letras de “Palacio” están compuestas por figuras geométricas muy simples, algunas con una cierta transparencia, para resaltar esa parte digital que hemos comentado.
En este tipo de marcas es muy importante que haya un símbolo gráfico que la defina y la recuerde. Para ello se ha compuesto un imagotipo con las iniciales de la marca consiguiendo que se insinúe una forma alegre, sonriente y simpática.
Respecto a la web, es de vital importancia la fácil navegación entre las categorías, los productos, el proceso de compra, etc. Se trata de una empresa con múltiples categorías, sub-categorías, y productos finales.
Para ello, es muy importante tanto separar gráficamente qué son categorías, sub-categorías, filtros de compra, productos finales, como facilitar mucho al usuario todo el proceso de compra: en este caso se ha optado por una sucesión de pasos numerados, en una misma pantalla.
